domingo

Me conoces

me conoces,
y cada una de mis palabras llega a tu mente antes de ser vista,
conoces bien mi reacción,
sabes que te disfruto,
me disfrutas.

se me hacen absurdas estas líneas,
pero sé que es formalismo, por eso aún las escribo,
eres la raíz y la silueta del árbol que construyo,
sabes bien que vivo a la medida de que faltes,
moldeado y modelado como un rompecabezas de dos piezas
al centro del paisaje.

no es destino ni suerte,
es una construcción
muy humana y muy consciente
lo que me ha llevado a comprender tu risa y tus chistes.

Aunque te sé renegada, terca, dramática y drástica,
también sé, y palpo, tu capacidad de elevarte más allá del momento per se,
más allá del acto, concebir los mensajes que estoy acostumbrado y harto
de tener que explicar.

No diré que soy para ti,
porque sé que no eres imprescindible,
porque aún tengo miedo
a que te sirvas de otro ser
sin que deje de ser espléndido, natural y sencillo,
como cada vez que salgo contigo.

miércoles

Mi propio camino

Porque a la hora de flirtear soy humo, cero, no existo,
por lo difícil que es hablar sobre tu atuendo,
tu blusa rosa transparente,
el tiro de tu sostén
porque no debo mirar tu boca si me observas
porque hoy soy tú rehén.

Se van terminando los temas 
¿qué harás al crecer? 
¿habrá valido la pena?

Me enciendes las esperanzas,
mas no espero hacerlo bien
prefiero que conozcas mi manera de ser, 
forjar en cada conversación un puente con tu ayer.

Quiero sumarte y que me sumes, 
y así multiplicarnos, 
quiero morderte los labios, 
y así mezclarnos.