domingo

"No te enamores de él"

Despiértame de esta pesadilla de iluso enamorado
con un beso que me aterrice en ti.

Dame con tu mirada la tranquilidad que anhelo
o tírame de aquí sin temor a mis heridas.

Soy el ogro que llegó a tu vida de cualquier modo,
el insensible que te haría sufrir
pidiéndote talvés compasión de a poco,
pero que no me dejes caer de ti.

Las cosas no pasan de la noche a la mañana, como nuestro primer beso
no esperes el último momento para salir de mi
cultiva en mi, con cautela, el valor
para dejarte ir y ser feliz.

Te escribiré si nuestro amor se vuelve maravilloso
Te escribiré si nuestro amor se vuelve en la rutina
Te escribiré si nuestro amor se vuelve confusión
Te escribiré si nuestro amor no es más nuestro amor.

lunes

Dame un beso; parto mañana

Calculando cada instante como segundo eterno
en que no acaban de fluir ideas viceversas e indistintas,
cada cual con un toque de eternidad en tu mente,
sin obviar malos recuerdos ni momentos tristes;
pues no vacila el pasado para adentrarse al subconsciente
y recordarte lo que ya sabías; que la historia se repite.

Así pasaron siete instantes en mi mente
mientras no podía responder nada coherente
a las preguntas que me hacías.

Siempre fuimos más que solo amigos
y hoy somos más que solo eso, en nuestro mundo, a nuestro modo;
o más bien a tu modo, pues me lo has enseñado tú.

Ahora solo soy aquel,
único en mi especie con potestad de probar y entender,
jugar, juzgar y saber… evitar las consecuencias,
las malas consecuencias de amar: caer al amor no correspondido.

Si no opto instar tu estancia
no es, sino que ya estoy cansado de aprenderme
la misma historia del “si te importa, no me importa” y callo.

Por otro lado, no adviertas una lágrima en mis ojos si es que ocurre
es solo el miedo de sentir aquel desahucio del, por supuesto, destino.
Más bien ocupa en que sonrío levemente al mirar tus ojos
y secar mi sangre transparente.

Y si me acerco, digo; si te parece, dame un beso…

domingo

mejor... más suave

mejor… más suave.

tu nombre aún se escucha
por ahí, sin querer
mientras te voy dejando.

mis verdugos
te reviven muerta
solo por reencarnar las llagas
me repiten que no eres nada.

hoy te escribo un poema
como una tarea por hacer,
como un recado a mi madre
sin querer, pero queriendo.

ya, somos menos
cada vez que antes
y la retórica sobra
para decirte que de vez en cuando
te extraño.

nuestro mundo separado,
distinto y lejano, de la realidad
nunca será.
tú muerta no volverás
a compartir la inseguridad.

su piel es mejor que tu silencio, más suave.
buenas noches Soledad.

Viendo tus fotografías

.
Oh por Dios!
.
Yo no tengo nada que ofrecerte desde mi pequeño grito humillado,
solo te llamo como si hubiese algo para vivir contigo a mi lado
quitándote en una invitación todas esas cadenas que te hacen viajar,
ver, saber y vivir… ofreciéndote el sol del desierto y todos sus sueños húmedos.
.
Desde mi lado de la cama no se ve nada más que tu sonrisa
y yo pidiéndote que seas libre como si de eso supiera.
Quiero que conozcas el mundo que solo sueño
y por soñar me creo más valiente, más sabio y más vivo…
.
Lo que sería bueno para mí, es aprender de ti.
Sacar fuerzas de las piedras y del mar para amar y vivir;
lo que sería bueno es salir del corral y tropezar,
sentir que puedo errar de forma natural y no alterar tu emoción,
saber que puedo amar que ames y que ames que amo...
y que no solo somos dos… Pero, por ahora, eso es mucho pedir.
.
Así sólo quiero salir de aquí.